Señorita mía,
si tan solo pudiera estar ahí.
Escucharte, mimarte, abrazarte como pedís.
Si pudiera decirte
qué es lo que realmente pienso de ti,
qué eres tu para mí.
Si pudiera estar contigo ahí,
si pudiera con solo pensarte tenerte aquí,
creo que ya no seria cómplice de tus locuras ni pensamientos.
Señorita mía,
cuán fuerte te abrazaría,
cuánto tiempo te dedicaría si lo tuviera,
cuan romántico sería.
¿Que noche espero en la que no te vería?
Señorita mía.
No puedo responderte a la distancia con una sonrisa.
Solo me queda leer tus tristes lineas,
y desear que pienses
todo lo que por no buscarte
me lamentaría.
