... Con las Alas del Alma desplegadas al vient¤ ...

viernes, 13 de diciembre de 2013

Mientras nos dure el baile


¿Cómo podes vivir sabiendo que todas las baldosas,
con las que construis tu sendero,
estén flojas y se desvanecen en tanto despegas los pies?

¿Cómo podes vivir si sabes que tu caminar,
no va hacia ningún lado o que solamente,
estas explorando un plano vacío? 

Te inventas excusas, ¿no?
Intentas mantener tu mirada en un punto fijo,
para evitar horrorizarte. 

Tratas de darle la espalda,
a la idea de que vas a desaparecer. 
De que te estas acabando. ¿no?


¡Pero si te suspira en el hombro!
Sumergido, lo podes escuchar.

Por eso haces ruido, aplaudís y gritas; 
hablas como un loco.
No toleras tu silencio porque es parecido a que no estés.
Tu charlatanería se debe a que te querés hacer notar.

Pero lo que digas, se olvida cuando no estés.
Por eso: ¡USA TUS BUENAS OBRAS!!
Ellas te revivirán y todos te recordaran.

Para que no se desvanezca ese colchón de mentiras 
en el que te aplastas cómodamente sin aire,
se buen ejemplo y disfrútalo,
mientras nos dure el baile.


Un benévolo amor








FELICES 16 meses! Va con mayúscula xq realmente fueron felices y cada dia lo son más! Es que somos una pareja d Dios q quiere formar una flia d Dios y x eso la felicidad es inmensa xq solo Dios basta... TE AMO!







jueves, 12 de diciembre de 2013

¡No me voy del bata, él viene conmigo!


Qué difícil es despedirse de algo que no termina. Qué difícil es irse del lugar que siempre me recibieron. Qué difícil es cerrar tajante en un momento, lo que se abrió suave y luminoso en tantos años. Qué difícil es tener este nudo en la garganta que me obliga escribir esto. Qué difícil es irse de si mismo, de ese lugar donde fuiste auténtico y donde te alegraba la existencia. Era tan lindo ese lugar… Tan lindo que estabas siempre alegre. Era tan lindo que si estabas enojado o triste, preferías estarlo ahí, y no en otro lado. Por que te sentías libre entre muros y paredes. Que curioso ver que al salir de esa pequeña porción de espacio, es cuando te enconarás con todo el mundo y ahí careces de libertad, ¿Cómo puede ser que al salir de un lugar miles de veces mas chico que el propio mundo te sientas mas encerrado que dentro de este rincón? Salir de la estructura activa del bata, es algo que siempre sabia que iba a suceder, pero nunca quise pensar en eso. Ahora que lo pienso… se me infla el alma de tantas cosas vividas… es triste, no por irse, sino por no poder contar lo que es. Me siento como cuando un hijo ya mayor se va de su casa, o como cuando uno rompe con su primer amor. Tanta gente en la historia lo debe haber tratado de contar y nadie debe haber podido. Lo que queda es todo material, y uno lo guarda más por recuerdo que por valor. Uno guarda como si eso pudiera hacerle sentir eso que fue espiritual. Eso que el alma llenó, no lo puede llenar una foto o una copia de una consigna o algún afiche. Yo me pregunto ahora ¿Qué hago con todas las carpetas de consigna del bata? ¿Qué hago con los archivos separados de la computadora, clasificados por año y etapa? ¿Qué hago con mis partituras? ¿Qué hago con los C. A. S.? ¿Qué hago con lo que viví? ¿Qué hago con la melodía del Himno que nunca pude cantar completo? ¿Dónde guardo la estrofa que dice “Yo llevo en la sangre una carpa y un hacha…”? ¿Qué hago con el cuaderno de la reunión de consejo (que ya tantos dibujos tiene) y la lapicera rosa? ¿Dónde dejo el equipito de mate que me hice especialmente para el bata? ¿Qué hago el Sábado a las 14hs y el Domingo a las 9hs? ¿Qué hago con la mochila de escudos cocidos?


¡Esto me muestra que todo lo que empecé, lo empecé como para no dejarlo nunca, sabiendo que lo dejaría!!

Tengo mi leño aquí, ¿Será el adorno que pondré arriba del hogar en mi casa? Porque tampoco sé que hacer con las cenizas de la experiencia del fuego, con mis escudos originales, con el agua de la experiencia del agua, el Evangelio que me dieron en la reafirmación. No se que hacer con el llavero donde tenia las llaves del bata. No se que hacer con un vaso, sino pedir plata para el mate. ¿Dónde guardare la carta de reafirmación? Todo bien con Don Bosco pero ahora que mi ciclo termina, siento que se borra y que no se quiere hacer cargo de todas las cosas que me quedaron y no se donde dejar. Tengo que hacer espacio, o una cajita aparte, para mis medallitas de buena asistencia. ¿Dónde esta el fruto de los rosarios que rece por el bata, la noche en que hice mi promesa, mis anhelos en él y los sueños que quise realizar? Eso de “mi mochila guardara mis anhelos, mi promesa mi rosario y mis sueños” pareciera que es solo para cuando estas activamente en el bata… Pero ¿Después? Si prefiero mas bien ordenar el depósito que mi vida, limpiar sala de jefes antes que limpiar mi memoria, hasta incluso prefiero mil veces izar la bandera en ese mástil que bajarla en cualquier otro! ¿Para que fui a esa pernoctada o campamento si ahora no me lo puedo sacar de mi cabeza? ¿Dónde esta mi trabajo? ¿En donde pongo la sangre? Quiero ver más a los 40 chicos que se fueron antes que los 4 que se quedaron, gracias a mí. Ahora que el bata para mi empieza a ser una “otra cosa mas ya cumplida” no encuentro consuelo alguno, para los años que mi vida reservo para ese patio.
Patio feo y desnivelado! Sin desagüe, áspero, duro, rosa y blanco y con cuadrados insufribles, con manchas de mate cocido, patio viejo y caminado, peloteado y masoqueado por carpas y caños, ese patio tan antiestético y sucio: SI!. Patio sólido, remachado y gastado. ¡PATIO DE FIERRO, PATIO QUE AMO! ¡Si me habré caído allí, como lo agradezco!! Porque cada vez que veo esta cicatriz pienso en todas mis caídas que sufrí. No puedo llevar un mejor recuerdo en mi cuerpo!
Cada vez que cocine para muchos me acordaré de esas ollas y esas parrillas, o si tengo que hacer un fueguito o encender un fósforo, basta para recordar el pagoda que me hizo prometer algo que nunca olvidaré. No recuerdo haber pasado otra puerta más veces que el portón verde, o negro, no importa, el portón es el mismo, al igual que la mesa más firme que conocí: La mesa de sala de jefes.
Quiero decir también, sin miedo de ofender a nadie que no vi cosa mas desordenada que el armario de deportes, ni cosa más irregular que el armario de limpieza. No conozco otro cajón mas pesado que el de electricidad (que tantos músculos me dio). No conozco otra guirnalda que las del bata, ni otro frontón. Todo parece una tomada de pelo. Cuando pasa el vendedor de sandia o huevo en ese carro y escucho esa bocina me acuerdo de las bocinas del bata. Cuando escucho la palabra “media mañana” me acuerdo de un sándwich de pan y mortadela. Si me dicen “colchoneta” pienso en el cajón y las colchonetas amarillas (mas duras que el hormigón). Y si me dicen “cajón” pienso en algo que tenga que sacar de la sala del “tony”. Si me dicen “deposito” pienso en una escalera amarilla que nadie sabe como bajar con las dos manos ocupadas y con una olla tiznada. Si me dicen “mástil” pienso en dos banderas y no en una. Porque el Batallón, no cambia la vida, crea otra vida mejor. Y cada palabra tiene un significado nuevo. “Interno” es el adjetivo de un patio y punto. “Banda” es lo que suena cuando son las 6 y “flor de lis” es un escudo y no una flor. Me gusta pensar más que existen rondas cuadras como la “ronda del mate cocido”. Y “ciclismo” solo se remite a bicicletas negras de paseo. “Martes”, es día de reunión, a las 9 puntual como lo indica ese “reloj de pared”. Si me dicen “atención”, lo grito más fuerte. Tengo tan en mente la “camisa verde” que cuando me tengo que poner el traje tengo que pensar en ponerme esa camisa rara con corbata, ahora que mi camisa se va, me queda la percha vacía en mi placard incompleto. No le encuentro sentido a los picaportes, porque de hecho la puerta que atravesaba para buscar pelotas o guardar algo en los casilleros, no tiene picaporte. Un animalito que me acompaño: La rata. Un cuadro, el de Jorge Irizarri. Un botiquín, el chiquito. Un trapo, la bandera de la agrupación masculina. La yerba se pone en un frasco grande de vidrio. Un perchero, el palo del arco de futbol. Y… ¿Quedo mal si digo que las discusiones fuertes me gustaron? Porque ahora, perfilado en el tiempo veo qué lindas que eran, porque las recuerdo con nostalgia.
Díganme, hagamos la prueba; Si yo digo: “María Auxiliadora” ¿Quién no pensó en esa imagen de la Virgen con manija y tapa de vidrio? ¿Cómo se explica que nunca recibió un pelotazo estando siempre en el patio? Hemos rotos, vidrios, reflectores, cortinas, cabezas, matafuegos, caras, vasos, rompimos de todo! Pero nunca la Virgen! ¿Quién puede imaginarse la entrada al patio sin la cara de Don Bosco?
La alegría es algo que le enseñaron a Domingo Savio y que yo lo tengo que tener siempre y no una sonrisa comercial. Cada vez que escuchamos un búho es señal de que hay aire de campamento. Y la verdad, estoy seguro que nunca me embarraré de nuevo tanto como en un campamento. La Hincama (Que nadie sabe como se escribe), la guerra de los números, rompe piernas y el canto de “Buenas noches”, se lo enseñare a mis hijos. Nunca me sentiré tan cansado y de manera tan linda como en un campamento de verano al 5to dia. En retrospectiva, quisiera vivir en ese estado. Nunca apreciaré tanto un mazo de cartas como ese que recibí en las zapatillas en un día de reyes. ¿Cómo será mi día de reyes ahora que no estoy de campamento? Extrañare la mañana particular de un campamento y ver el pasto aun mojado al levantarme. ¿Como será el sol ahora? Y, sobre todo, ¿Cómo seré SOL ahora? Si no tengo lo que me enseñó a serlo. Si alguien me gritaba era: “¡abrí las orejas!” o “¡Arriba campamento!” Cuantas dudas y preguntas. Se contarlas: 1,2, pi… Oración preferida: La del Explorador (que ya se, después de tantos juegos, cuantas letras “a” tiene). Un juez es el que te da la pista y no un fiscal. Y el hilo sisal solo sirve para el rincón de patrulla. Un cargo es el rol de un juego de todo el campamento; como el zorro. Es que uno siente tanto amor por este bata que lo termina aborreciendo porque se acaba y te deja lo que nunca pensaste en recibir. Te vas del bata, y te sentís solo. Como un niño abandonado bajo la lluvia en un desierto. Pero en el fondo, si lo pienso mejor, lo vuelvo a abrazar, porque camino por la calle y me doy vuelta y miro atrás y veo a tantas personas caminar, entonces vuelvo a girarme hacia adelante y con “la frente levantada” pienso en que después de tanto vivir, este bata no cambió la órbita del mundo, pero me salvó a mi. Siento la piel de gallina si combino Batallón y recuerdo. Porque es eso, un generador de recuerdos y vivencias. Si uno recordara las cosas que ser explorador implica, no terminaría nunca! Y mucho menos si es como explorador, que aprende a ser artífice de su vida.
Que dicha tan grande me ha dado Dios, al darme el privilegio de morir como explorador. Que dicha tan grande me ha dado ser explorador, al darme el privilegio de morir como Dios quiere. Como buen cristiano y honrado ciudadano. Esto que termina esta empezando, y hay que seguir “sin miedo y sin tacha” porque “es un camino de honor, es la ley del servidor”. Y hablando de honor… Finalizo con decirles que si tengo que gritar algo, el único grito que conozco es:


¡POR TODAS PARTES EL HONOR DE SER UN DIGNO EXPLORADOR!


¡Gracias, Don Bosco, por todo!
Javier Soerensen


martes, 3 de diciembre de 2013

Tonto y loco


No te sientas obligada 
a perdonar a este tonto loco
que se muere si te lastima.

Por ser la modelo de mis ojos,
de la cual estoy enamorado,
gracias al triunfo asombroso.

Que después de haberte lastimado
en un segundo tan solo,
solo hiciste mirarme sin enojo.


Angel












Tu eres mi ángel, 
porque tu haces de mi, 
lo que nadie jamas hará,
lo que a nadie permití.